miércoles, 15 de octubre de 2014

Mohamed Ali Clay


 




25 de Febrero de 1964

Louisville, Kentucky

Estimado alumnado de 4º Diversificación


La fecha de hoy es la de uno de mis días más importantes. Hoy abracé la fe islámica y me gustaría compartir esta felicidad con ustedes, lo que hace que este día sea muy especial para mí. Después de muchos años que llevo perdido en la vida, hoy y por fin encontré mi camino, el camino real y verdadero.

Dicen que soy uno de los mejores boxeadores de la historia, pero yo creo que cada uno es el mejor en lo que hace, y como siempre digo, Para ser un gran campeón, tienes que creer que eres el mejor, si no lo eres, haz como si lo fueras.

Practico este deporte al que le llaman El arte de nobles (en mi cultura árabe) desde los 12 años y es mi única pasión en la vida .

El combate de este año será y es el último de mi carrera, o lo gano o fracasaré para toda mi vida y esto es lo que no va a pasar porque después de muchos años luchando no será un solo reto el que me hará fracasar. Entraré al terreno de combate como nunca entré, lucharé como nunca luché y sobre todo disfrutaré como nunca disfruté. Mis logros hablan de mí y son :

Campeón olímpico en 1960
Campeón de los Pesos Pesados: 1964-1974-1978
Peleas por el título: 25 
Victorias: 22
Derrotas: 3

Eso hace que esta batalla no sea el reto más difícil al que me enfrenté, porque confío en mis manos, guantes, fuerza y agresividad.Y por eso llaman a mi técnica "volar como una mariposa y picar como una abeja".

Con mi gran experiencia lo lograré todo y esta vez sí que voy a por la peonza de oro y aunque me condenen y me quiten mis premios, nunca pero nunca dejaré de luchar por mis sueños y no es imposible porque "Imposible" es sólo una palabra que usan los hombres débiles para vivir fácilmente en el mundo que se les dio, sin atreverse a explorar el poder que tienen para cambiarlo.
"Imposible" no es un hecho, es una opinión. "Imposible" no es una
declaración, es un reto. "Imposible" es potencial. "Imposible" es
Temporal, "Imposible" no es nada.

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En 1967 me negué a incorporarme al ejército alegando ser musulmán y por lo tanto objetor de conciencia. A mí no me importó exponerme a un castigo de cinco años de prisión y 10 mil dólares de multa por negarme a servir en las Fuerzas Armadas Estadounidense. Y allí dije No cuentes los días, haz que los días cuenten. Esto es lo que me enseñó este deporte sagrado, me enseñó a no tener miedo, me enseñó confiar en mí mismo y sobre todo me enseñó a ganar y dedico este mensaje a cualquier persona en el mundo.


Un saludo


M.A.C



P.D: Recuerdo que mi hija es una de las mejores boxeadoras actuales. Mis puntos de habilidad son que Soy tan rápido que cuando apago la luz me meto en la cama antes de que todo el cuarto esté a oscuras.

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